¿Cómo comentar estos discos? La música contenida en ellos pertenece a las bandas sonoras del cine japonés de los setenta. Películas de yakuzas sobre todo y alguna de samuráis, y lo mejor, los temas están cantados por los mismos protagonistas: Meiko Kaji, Bunta Sagawara, Koji Tsuruta, Sonny Chiba y Tomisaburo Wakayama entre otros. Sí, ya sé que se quedaron casi en las mismas, pero les aseguro que conociendo un poco esos actores, el factor cool se ve potenciado. Musicalmente es bastante uniforme, siendo casi una música para aplanchar en japonés. Si vieron Kill Bill, saben de qué les hablo, pero también si vieron de pequeños Mazinger, Centella o José Miel, pues a pesar de ser temáticamente diferentes, guardan similitudes musicales: una especie de rock con trompetas, como Raphael o Nino Bravo en los sesenta. Casi se puede ver a las nenas con minifaldas y largas pelucas bailando ante decorados psicodélicos, mientras el cantante usa un micrófono con un larguísimo cable enredado entre sus manos. Es un disco para fardar ante los amigos que entienden de esto. Pura memorabilia retro, apta sólo para desequilibrados sociales como nosotros. Los demás no entenderán mucho por qué nos gusta tanto. A mí por lo menos me gusta porque me remite a imagenes y tiempos muy buenos.
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